NARRACIONES EXTRAORDINARIAS. EDGAR ALLAN POE

LA CARTA ROBADA

El cuento trata sobre un hombre que una noche se encontraba con su amigo Dupin con pipas y meditando en una pequeña biblioteca, cuando de repente la puerta se abrió y entró el prefecto, un amigo de ambos hombres el cual era miembro de la policía de París.

El prefecto les contó sobre un caso de una carta robada, en el que la persona afectada se había percatado de aquel robo pero aún así no había dicho nada, pues esta carta la había tomado el ministro D... quien desde que la robó la habría estado utilizando debido a su contenido para fines políticos los cuales eran peligrosos. La persona a quien iba dirigida tal carta tenía la necesidad de recuperar la  pero no quería que ello se hiciese público, y además le había ofrecido al prefecto mucho dinero si encontraba la carta. También les contó que llevaba una semana inspeccionando cada una de las partes de la casa del ministro sin encontrar nada.

El prefecto les pidió algún tipo de consejo u opinión y a esta petición Dupin le dijo que volviera a casa del ministro D a buscar de nuevo por todas partes, así que el prefecto se marchó. Un mes después el prefecto volvió muy estresado pues su búsqueda no había dado resultados y la persona dueña de la carta había doblegado el valor de la recompensa y les dijo al hombre y a Dupin  que quien le entregara la carta en sus manos le daría un cheque con mucho dinero pues él no podía resolver ese caso. A esto Dupin le dijo que si le firmaba el cheque él le entregaría la carta, el prefecto le entregó el cheque y Dupin la carta y fue tanta la alegría del prefecto que se marcó sin decir nada.

El hombre estaba confundido así que le dijo que él había notado que el prefecto trabajaba a su modo como era de costumbre al igual que los demás policías y no se había tomado la molestia de estudiar al ministro ni de tratar de pensar como él, era lógico que el ministro quería hacer pensar que la carta no estaba en su casa. Así que un día Dupin fue a ver al ministro y hablaron de temas importantes, ahí Dupin notó una caja pequeña de cartón en la cual habían varios papeles y además una carta que parecía escrita por una mujer pero su el papel era muy grueso, Así que se marchó y volvió al día siguiente por su pipa de oro y siguió platicando con el ministro cuando desde afuera se escuchó un disparo de un hombre loco y el ministro se fue a observar y ahí Dupin cambió la carta por otra similar, elaborada por él y luego corrió a ver al loco a quien él miso le había pagado, y después se marchó.

Él y el ministro en el pasado habían tenido problemas y además a Dupin no le gustaba su política así que no dejó la carta en blanco, pues escribió las hallará usted en atreé de crebillón para que supiera quién se había llevado la carta.

El cuento deja un mensaje y es que cuando queramos investigar a alguien tenemos que pensar como aquella persona, ver como se comporta, que opciones tiene,  etc, y no solo quedarnos nuestros propios métodos o sospechas, tenemos que ser más audaces.

Angie Alejandra Gómez Silva .